LA PREVENCION REAL DEL DELITO NO LE INTERESA A NADIE

El Juez de la Corte Suprema, Eugenio Zaffaroni, reflexiona sobre el poder de los medios para convertir a los chicos en enemigos sociales y qué pasa con las políticas públicas para proteger a los chicos atrapados en el delito. Asegura: “Los homicidios de chicos menores de 16 años en el país no pasan del 1 por ciento del total. En Capital Federal hay dos en los últimos cinco años. En general son hurtos y lo que pasa con los medios es que levantan el discurso policial”.

Por Alicia Cytrynblum y Adrián Arden

Capítulo Infancia de Periodismo Social.- Eugenio Zaffaroni es Juez de la Corte Suprema de la Nación y uno de los más respetados especialistas en criminología del mundo. En los últimos meses ocupó espacio en todos los medios en medio de la discusión por bajar la edad de imputabilidad para los chicos en conflicto con la ley penal. En una charla con el Capítulo Infancia de Periodismo Social, reflexionó sobre el papel de los medios en la instalación de la sensación de inseguridad y de cómo se fabrican los enemigos en la sociedad y los diarios. Y, también, de cómo ahora ese enemigo son los niños.

Aseguró: “Cuando no tenés otro enemigo para instalar el mundo paranoico se cae en el delito común, que, de todos modos, tiene un inconveniente como enemigo: es limitado. Sólo le podés imputar delitos comunes, no como a las brujas, que les podés imputar todo. ¿Y qué se hace? la noticia se magnifica y, si el enemigo hace algo, eso es lo más grave que hay...y se enfoca en determinado momento en los pibes (…) que no es que cometan delitos graves, los homicidios de chicos menores de 16 años en el país no pasan del 1 por ciento del total. En Capital Federal hay dos en los últimos cinco años. En general son hurtos y lo que pasa con los medios es que levantan el discurso policial”.

Lo que predomina es homicidios entre gente que se conoce, entre familiares. Con respecto a los pibes, en general son hurtos y lo que pasa con los medios es que levantan el discurso policial”.

- ¿Cómo observó la cobertura mediática de los casos Barrenechea o Capristo, en los que hay chicos señalados como culpables de esos asesinatos?

- Tenés dos problemas ahí. En general, un medio, sea escrito o televisado, especializado en noticia roja, nunca genera alarma social ni miedo. Porque, tal como la pornografía, tiene un público al que le gusta eso, siempre existió. El problema es cuando lo hace un diario tradicionalmente serio, que aumenta el número de metros cuadrados dedicados a la noticia roja. Es decir, un medio que no está dedicado a eso. Ahí, cuando ves que la noticia pasa a la primera página, es porque hay una intención de causar algo, hay una intención de mostrar que el enemigo del momento está ahí. Ahora es un enemigo residual, ¿no?

- ¿Y para qué los medios necesitan crear un enemigo?

- Siempre hay que fabricar un enemigo para instalar un mundo paranoico, para vender más, a veces por una intención política, no sé. Normalmente, en este momento, la fuente de inseguridad existencial que hay en la sociedad tiene que ver con la crisis del Estado de Bienestar en el mundo, entonces el fenómeno no es sólo nuestro, sino que nos llega un poco tarde, porque este fenómeno empieza en Estados Unidos. ¿Cómo se explica esto? A través de la crisis del Estado de Bienestar se frustran proyectos, se te hace impredecible el futuro de alguna manera. Eso genera un ámbito de angustia amplio.
¿Cómo se baja la angustia? Encontrando un enemigo, porque entonces todos los proyectos, por dispares que sean, necesitan un primer paso común que es destruir al enemigo y neutralizarlo, y así la sociedad se cohesiona de alguna forma.

- ¿Quién es el enemigo en este momento?

- Bueno, depende de cada sociedad. Hitler encontró a los judíos, cuando no tenés un mejor enemigo condenás un delito común, es residual. Si tenés uno más idóneo, usás al más idóneo. Cuando te entra otra fuente de angustia (el dengue, la fiebre porcina), o desaparece y se tiene un enemigo más ideal, entonces fabrican otro.

- ¿Le sorprende que sólo el 4 por ciento de las fuentes consultadas sean niños?

- No, no me sorprende nada porque en definitiva hay una desidia que proviene del Estado mismo. No tenés una fuente de información real. Si vos salís en este momento a decir que va a haber una corrida bancaria, va a salir el ministro de Economía a decir algo, si decís que hay un brote de cólera va a salir el de Salud…en el caso de los chicos no es así. Por eso, primero que alguien salga y diga datos. Pero no hay nadie que tenga datos que puedan prevenir, entonces a la conclusión que llego es que la prevención real del delito no le interesa a nadie. Lo primero que tenés que hacer si querés prevenir es conocer, sino no sabés lo que vas a prevenir, pero a nadie le importa.

- ¿Qué falta entonces?

- En el país no se invierte nada en investigación criminológica de campo, si no tengo una investigación criminológica de campo no sé qué pasa. Dicen que los homicidios son uno por año, bueno, pero cómo, cuándo, quiénes, cuáles son los riesgos de victimización, en qué circunstancias. No lo sé. ¿Tengo que poner luz en las calles, comprar chalecos antibalas, comprar helicópteros? No lo sé. Llego a la conclusión que en definitiva todo esto se maneja como una sensación y que a nadie le interesa la realidad, lo cual me hace sospechar que a nadie le interesa porque en el momento en que no conozco la realidad y puedo comprar helicópteros para prevenir violaciones, entonces puedo comprar los helicópteros que vende mi cuñado. El presupuesto de seguridad es uno de los más altos y es el que menos se controla, menos controles de optimización de recursos quiero decir.

- Hay algo que dicen muchos especialistas y adolescentes encerrados en institutos, que en épocas de conmoción social y mediática por algún asesinato protagonizado por algún chico menor de edad, los jueces se ponen más severos en sus condenas que en otros momentos.

- No sólo eso, esas campañas nos han destruido el Código Penal, hoy es un desastre, es una catástrofe lo que han hecho. Los culpables son las leyes Blumberg, entre otras cosas anteriores. Es una catástrofe lo que se ha hecho y los jueces tratan de intimidar. Es decir, frente a una campaña mediática de esta naturaleza, frente a esta presión mediática, los políticos quedan presos. En este momento hay un discurso único de medios que controla a los políticos. En la época de Stalin o de Hitler eran ellos los que controlaban a los medios, ahora son los medios los que controlan el discurso político.

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"Cuando los medios hablan de los chicos en conflicto con la ley penal”

El Capítulo Infancia de Periodismo Social presenta este martes 18 de agosto el informe especial: “El Encierro Mediático, los diarios y los chicos en conflicto con la ley penal” en el Centro Cultural Rojas de la Ciudad de Buenos Aires , junto a sus socios estratégicos UNICEF en Argentina, Fundación Arcor y Fundación C&A.

El informe es el quinto de su serie anual, “Niñez y adolescencia en la prensa argentina 2008” donde detalla un exhaustivo análisis sobre lo publicado en 2008 por 22 diarios de todo el país.

Algunos adelantos:

• Una de cada cuatro noticias sobre chicos acusados de cometer delitos no citó fuente alguna. Es decir, el 25 % del total.

• El 65 por ciento de las noticias sobre chicos en conflicto con la ley penal incluye términos peyorativos.

• El destino de adolescentes y jóvenes infractores y presuntos infractores de la ley penal, su realidad respecto de la salud y la educación, y cuál es el trayecto que realizan en el Sistema Penal son aspectos casi desconocidos por los medios y sus periodistas.



El día de la presentación se llevará a cabo una mesa redonda para reflexionar sobre el tema “chicos, medios y delito” con la presencia de:

• Eugenio Zaffaroni (Juez de la Corte Suprema de Justicia de la Nación);

• Florencia Saintout (directora del Observatorio de Comunicación, Juventud y Medios, de la Facultad de Periodismo de La Plata)

• Gimol Pinto (especialista en protección de derechos, UNICEF-Argentina).

• Coordinación de Liliana Hendel (psicóloga y periodista de Canal 13).